Es un placer encontrar a un grupo de almas gemelas aficionadas al mundo de las setas y de la gastronomía. Y digo de la ʺgastronomíaʺ, no de la gastrotontería que está tan de moda ahora y que tan rentable resulta para sus explotadores como onerosa para los explotados. He navegado mucho por esas aguas y he disfrutado también mucho compartiendo mi experiencia con los aficionados a este curioso mundo que solo se entrega a los que de verdad lo aman. Será estupendo navegar por aguas nuevas con otros compañeros de remo y de cuchara, que estoy deseando que me enseñen muchas cosas.
Mi más cordial saludo a los lectores de estas páginas.
Por Juan Antonio de la Rica