En Agosto hay muy pocas personas que lleven setas a las sociedades micológicas, para saber si son o no comestibles; todos sabemos el motivo, en verano si no hay humedad son un bien escaso; ahora bien, setas siempre hay.
Claro está que tiene que llover, si bien este año ha sido un mes bastante caluroso; pero aun así hemos visto cosas bastante curiosas e interesantes en nuestras salidas al bosque; donde además de disfrutar de gratos paseos al aire libre y bellos parajes que siempre es fácil encontrar en las innumerables rutas de nuestra comunidad posee.
Las salidas este mes fueron realizadas por los concejos de Infiesto, Ribadesella, Colunga, Bimenes, Villaviciosa, Campo de Caso y Sobrescobio.
Se podría ir por otras rutas distintas, por supuesto que sí y seguramente hubiéramos obtenido el mismo resultado. Todas las rutas las hicimos con la premisa de ir por lugares sombríos y que guarden humedad, como el hayedo del Infierno, y rutas de antiguos molinos, que es donde más fácil podemos encontrar estos ambientes.
Rio del Infierno, Infiesto
Lo encontrado han sido interesantes para realizar una buena degustación.
En la primera quincena del mes recogimos ejemplares de: rebozuelo, lengua de gato, lactario anaranjado, rusula comestible, carbonera, gorro verde, boleto de verano, y desde luego son estas las que yo recomiendo para comer por ser las que se suelen encontrar en estas fechas y también las más apreciadas en general por los amigos seteros.
Hay que decir que todas estas ya las hemos visto en los meses anteriores, no obstante pongo algunas fotos que corresponden al mes actual.
CANTHARELLUS CIBARIUS - HYDNUM REPANDUM,
Campo de Caso (Rebozuelos – Lenguas de gato)
LACTARIUS VOLEMUS, (L, anaranjado) - Sobrescobio.
RUSSULA VESCA, (R comestible) - Villaviciosa
BOLETUS AESTIVALIS, (Boleto de verano) - Infiesto
La segunda quincena nos fue peor, pues llovió poco y en algunas zonas de montaña encontramos el terreno muy seco, por lo cual tuvimos que insistir en las zonas más húmedas, ya citadas; donde si vimos cosas interesantes; pero no de interés comestible y cuyas fotos ponemos a continuación.
POLYPORUS SQUAMOSUS, Ruta de los molinos – Ribadesella.
COPRINUS PATOUILLARDII, La Biescona – Colunga
PSATYRELLA CANDOLLEANA, - La Biescona, Colunga
Esta es una seta también comestible, de escaso valor. Es muy abundante y nadie la recoge con fines culinarios, al menos en nuestro entorno.
PHALLUS IMPUDICUS, El Infierno, - Infiesto
Algunas de estas se podrían comer, incluso el Phallus impudicus, cuando está en fase de huevo, según algunos libros; pero nadie lo hace y prefiero en este sentido, recomendar aquellas que se comen habitualmente sin ningún tipo de inconveniente. Dicho esto, mi recomendación es llevarlas siempre a una sociedad micológica para tener la seguridad que son comestibles y no fiarnos de nuestra propia clasificación.
PHALLUS IMPUDICUS, - en fase de huevo.
Estamos entrando en el mes de septiembre; este es un mes con mejores perspectivas, con lo cual empezaremos a ir hacia el occidente en busca de níscalo, boleto calabaza y b. pinicola; pero no sin dejar de ver lengua de gato y más cosas como la amanita vinosa que suele ser abundante en esta época, también algunas rusulas.
De momento seguiremos algún tiempo por las rutas del verano, pues creo que aún tienen que aparecer todas aquellas que no se vieron a finales de Agosto por falta de agua.
BOLETUS APPENDICULATUS, - Campo de Caso.
Este boleto también es comestible; pero vuelvo a lo dicho anteriormente, no se ve con frecuencia ni es de la mejor calidad, por lo cual, será difícil ver recolectores que concretamente busquen esta especie; ahora bien, si lo encontramos, nos vendrá estupendo para nuestro archivo fotográfico.
Muy poco frecuente y de fácil confusión con Disciotis venosa; que nace sobre tierra y tiene un fuerte olor a cloro.
Esta especie no es nada fácil de ver, os puedo decir que es muy bonita los sombreros tienen unos brillos dorados que nos llamaron la atención, si bien en la foto no se aprecian con claridad.
RAMARIA FORMOSA, (Ramaria elegante) - Villaviciosa
Las ramarias son difíciles de identificar, hay muy pocas comestibles y la mayoría son venenosas, suelen encontrarse en grupos y su mayor valor, a mi juicio, es mas por la curiosidad que despiertan; por supuesto no aconsejo su consumo.
No quiero dejar de deciros que este verano no vimos trompeta de los muertos, ésta es una de las que faltaron; pues aunque son propias del otoño, aparecen algunos años con las tormentas de finales de Agosto.
Un saludo a todos y espero os sirva un poco de orientación en vuestras recolectas.
Juan R. Glez. Diego