Mr. Ken me recuerda que llevo mucho tiempo sin hacer ningún artículo para el blog así que le digo, voy a hacer uno sobre las setas en verano, que como sabes muchos aficionados creen que no hay, pero setas hay siempre, dependiendo de los factores climatológicos de humedad y temperatura; por tanto, me centraré en el mes de agosto que es el más caluroso y por ello el menos propicio.
En este mes es muy frecuente que salgamos en busca de Cantarelas en bosques de castaños, empezaremos por estas y seguiremos por todas aquellas que podamos ver en nuestras salidas y que tengan algún interés y no sólo el culinario.
Cantharellus cibarius,- Cantarela, Rebozuelo
La Cantarela o Rebozuelo la recolectamos normalmente en bosques de castaños; pero es una seta que aparece en todo tipo de hábitat, la encontramos en robledales, hayedos, pinares, incluso en eucaliptales y otros.
Es muy apreciada para la cocina, está sabrosa en revueltos y tortillas, pero con ella se hacen incluso postres, mermeladas y hasta licores.
Cantharellus cibarius.- Cantarela
Su identificación es muy fácil por su color amarillo que una vez nos acostumbramos a él se divisa desde lejos en seguida. Puede ser de un color uniforme todo el ejemplar, pero también es muy frecuente que debido a los agentes meteorológicos no sea así y presente a veces un amarillo muy blanquecino en el sombrero, en el pie o en ambos.
La carne es blanquecina sobre todo en el interior del pie y no tanto en el sombrero; tiene un olor afrutado muy agradable a melocotón o a albaricoque.
Las láminas son su detalle de identificación más claro pues son pliegues y no verdaderas láminas, detalle este que hace a esta seta inconfundible, a no ser con otras especies del mismo género o con variedades de la misma especie, lo cual no presenta ningún problema pues son todas buenos comestibles.
Cantharellus cibarius, - Cantarela
Detalles de los pliegues, que son además muy decurrentes sobre el pie.
Cantharellus friesii,-
Esta especie suele ser más pequeñita y de un color más anaranjado y también más uniforme, su aspecto es más frágil y tampoco tiene un olor tan persistente, a pesar de ser comestible como todas ellas; algunos autores aconsejan no comerla y preservarla por su rareza.
Esta es una especie más rara, que nosotros vimos un par de veces en el mismo hábitat que el rebozuelo, el sombrero es hueco y presenta un color amarillo tirando a limón y los pliegues tienen un tono violeta, el pie es robusto y están unidos varios ejemplares por él; es muy escasa sólo la vimos en dos ocasiones.
Craterellus cornucopioides,- Trompeta
La Trompeta o cuerno de la abundancia la encontramos ya varios años en este mes de Agosto, si bien aparece hasta en pleno otoño y con más profusión.
Esta especie presenta un color gris en toda ella, siendo más claro en la zona del himenio; los pliegues apenas se aprecian a simple vista pues son muy finos, suele aparecer en grupos numerosos y, con tiempo húmedo, coge un color más oscuro casi negro. La carne también tiene un olor afrutado y agradable, es una seta muy apreciada y de mucha utilidad en la cocina, se conserva muy bien seca y se utiliza también en polvo con mucho éxito. Nosotros la hemos visto en castaños, robles y hayedos.
Hydnum repandum,- Lengua de gato
Otra seta estupenda para la cocina, el sombrero presenta un color crema rosado muy bonito, otras veces simplemente crema y puede llegar a ser blanco. Es muy fácil de reconocer ya que tampoco tiene láminas, el himenio está formado por unos aguijones o púas del color del sombrero decurrentes por el pie que también es blanco, así como la carne.
La lengua de gato aparece ya en verano y hasta bien entrado el otoño, tanto en planifolios como en coníferas, normalmente en amplios corros de brujas, pero a veces en pequeños grupos.
Hydnum rufescens,- Lengua de gato rojiza
La Lengua de gato rojiza, tiene el mismo hábitat, si bien en nuestra región la vemos con mucha menos frecuencia; tiene las mismas claves para identificarla, pero se distingue por tener ésta en el sombrero unos tonos claramente rojizos; Ocurre lo mismo con las púas, además de ser más cortas y no decurrentes; el pie es más largo y más delgado. Como comestible es más apreciada.
En la opinión de muchos, el mejor de los boletos. El color del sombrero suele ser marrón oscuro y a veces casi negro, también tiene en ocasiones tonos cobre, la carne es blanca inmutable; el pie de joven es más bien ventrudo y de mayor puede ser cilíndrico y alargado, de color castaño claro con un retículo blanco o del mismo color que el pie. La carne es dura compacta y de un sabor muy agradable. Aparece en verano y hasta entrado el otoño, en bosques de planifolios y con frecuencia solitario o en grupos muy pequeños.
Este boleto pertenece al grupo de los cuatro grandes, es de muy buena calidad; pero quizás no el más apreciado, debido a la carne que es más blanda; el sombrero tiene un color avellana, a veces más oscuro; los tubos tienen el color blanco y no azulean al tacto, con el tiempo amarillean y más tarde cogen un tono verdoso; pero nunca rosado, esto es muy importante para no confundirlo con el boleto amargo, no comestible. La carne es blanca e inmutable y tiene la dificultad de estar con frecuencia agusanado; tiene un retículo en el pie que suele cubrirlo en su totalidad. Aparece a partir de mayo en robles y castaños en grupos a veces muy numerosos.
Este lactario es fácil de encontrar en verano y dura hasta el otoño, tiene un color anaranjado, tanto en el pie como en el sombrero; el del pie es a veces más claro; pero no siempre. Las láminas son blancas un poco cremas, que se manchan de marrón en las rozaduras con abundante látex blanco que es dulce, al igual que la carne. Es comestible pero poco buscado crece en planifolios a veces solitario, se puede confundir con el lactario arrugado que también es comestible.
Fistulina hepatica,- Lengua de buey
Otra especie llamativa que aparece siempre unida a robles y castaños, normalmente en la parte baja, a veces en cierta altura, se distingue bastante bien por su forma de lengua o hígado y color marrón rojizo a veces anaranjado, el himenio presenta poros y segrega un líquido en forma de gotas. Los ejemplares jóvenes son buenos comestibles, se puede incluso comer cruda en ensalada y su sabor un poco acido resulta agradable; su época más frecuente es el otoño.
Sparassis crispa,- Seta coliflor
Especie también no muy frecuente que aparece en la base de los pinos y nos recuerda, como su nombre indica a una coliflor, puede llegar a tener un tamaño bastante grande, parece no tener pie; pero lo tiene y hace de base a todas las ramificaciones; la S. laminosa es parecida, pero las ramificaciones de esta terminan de forma plana y no redondeadas, además de aparecer en robles y no en pinos. Los ejemplares jóvenes son buenos comestibles; la carne tiene un olor agradable, sabor a nuez y admite muchas formas de preparación; el principal problema es la limpieza y hay que hacerla muy bien, su época de aparición es verano y otoño.
A modo de resumen diré que todas las especies de las fotografías, son comestibles, si bien en algunos casos se hace la observación de aprovecharlas en su estado joven, por otra parte, ninguna seta aun siendo buen comestible debiera comerse si es vieja. También decir que todas las fotografías están hechas en el mes de agosto, siendo algunas de años anteriores; sin duda alguna hay otras comestibles e incluso mejores; pero nosotros no las tenemos fotografiadas en dicho mes.
German y Manuel, exactamente en la fecha de hoy hace 9 años; estos dos recolectores estaban entusiasmados y creo, que se pegaron un buen atracón con unos cuantos amigos además de conservar parte de la cosecha para días venideros. Aprovecho para despedirme, un saludo a todos.
Fotografías y texto: Juan Ramón González Diego.
17 de agosto de 2018
PD: Los que pueden interesar las recetas de Kenneth de mermeladas etc, podéis pinchar en la barra de enlaces "Programa Sabores RPA" para oír sus programas sobre recetas de setas y mucho más.
Manuel.
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